Hace 244 años, en 1768, en la ciudad escocesa de Edimburgo, vio la luz la primera edición de la Enciclopedia Británica, uno de los libros del conocimiento más prestigiosos del mundo.
Ahora, instalados en Estados Unidos, en Chicago, se cierra su edición en papel y la Compañía se centrará en la elaboración de material para escuelas y en la versión digital. Entre otros motivos se encuentra el éxito de Wikipedia, la enciclopedia digital escrita por los propios usuarios, la cual supone una competencia muy grande debido a su gratuidad y fácil acceso, frente a los 1395 dólares que cuesta, en la actualidad, el paquete de 32 volúmenes de la Enciclopedia Británica.
Sin embargo, la nueva situación se afronta con ganas e ilusión. Según explicó Jorge Cauz, presidente de la Compañía, “es como un rito de iniciación en esta nueva era. Muchos se sentirán tristes y nostálgicos por ello, pero ahora tenemos una herramienta mejor. La página web está constantemente actualizada, es mucho más extensa y tiene contenidos multimedia”.
La Enciclopedia Británica fue la primera en llegar a Internet, en 1994. La tasa para acceder a la versión digital, que se actualiza cada veinte minutos, es de 70 dólares anuales, aunque algunos contenidos son gratuitos.