
Por Juan Noger
Como siempre, Milagrosa Monzón sorprende en sus formas de hacer, en cómo desarrolla los temas, cómo toma sus decisiones.
Sirva de ejemplo, cómo se plantea crear un cuadro. Las sensaciones que tiene antes de decidir cómo encaminar su trabajo son producto de una serie de inquietudes hasta llegar al punto de saber enlazar los trazos y las pinceladas que darán forma a su obra.
Veamos ahora sus propias expresiones antes de iniciar el cuadro.
«El lienzo en blanco para mí es el momento más fuerte, más inquietante…..¿y ahora, qué pinto? Mi cabeza me da vueltas…..imaginar…. Estrujo mi cerebro buscando un proyecto, una idea bonita, original. Es tal el estado de excitación que me acaloro. Me toco la cabeza y está caliente. ¡Puf. Ahora mismo me sale humo! Jajaja…. Apasionante.
Cuando me viene la idea, cuando ves algo que te alumbra. ¡¡Ay, qué nervios!! Coger el lápiz, hacer unas marcas rápidas y ponerme a pintar, a plasmar lo que quiero hacer y ahí empieza la aventura».
«Les cuento mi actual aventura, mi proyecto ahora es hacer una serie de ‘Olas del Hierro’ vistas con una mirada, que quiere captar la fuerza, el movimiento, la transparencia, sus luces, sus detalles….. y así, de proyecto en proyecto, voy caminando y avanzando….
Éstos son mis últimos cuadros».