45.000 millones. Esta cifra de la Secretaría de Estado de Comercio sobre las licitaciones que consiguieron las empresas españolas en todo el mundo en 2013 dibuja el papel de España como uno de los países que mejor se vende al resto de naciones. De hecho, las compañías españolas obtuvieron el año pasado 823 proyectos fuera de nuestras fronteras frente a los 705 de 2012 y, durante el primer semestre de este año, la mitad de las que cotizan en el selectivo Ibex 35 consiguió más del 70 por ciento de su facturación del negocio internacional, lo que supone siete de cada diez euros de ingresos, según publica Abc.
Y no es cosa sólo de un ámbito, sino que se trata de empresas de distintos sectores que triunfan fuera de España. Las compañías tecnológicas y de sistemas españolas que más despuntan más allá de nuestras fronteras son Abertis, presente en Argentina, Puerto Rico, Brasil, Colombia, Chile, Estados Unidos, Canadá, Francia, Irlanda e Italia y que gestionará próximamente el nuevo sistema de pago de peaje de uno de los principales accesos a la ciudad de Londres; Técnicas Reunidas, que aumentará la producción de gasolina en Bolivia, hará un complejo de hidrocarburos en Argelia y modernizará dos refinerías rusas.
Tecnología y moda son otros mercados en los que España es puntera a nivel internacional. En el primer caso, Telefónica tiene mucho empuje en Iberoamérica, de donde procede el 51 por ciento de sus ingresos, y con Brasil como el gran motor de crecimiento, aunque Reino Unido y Alemania empiezan a ser mercados importantes para esta compañía tecnológica. Por otra parte, Inditex tiene actividad en 88 mercados de los cinco continentes, donde cuenta con 6.390 tiendas, aunque México parece ser un mercado relevante.
En el caso de las constructoras, destacan ACS, a la que se le otorgó en 2013 la construcción del metro ligero de Ottawa, en Canadá; un tramo ferroviario en Hong Kong (China), la mejora de una autopista en Holanda, la expansión de un muelle en Australia o la ampliación de una terminal de un aeropuerto de Los Ángeles (Estados Unidos) y obras como la segunda línea de metro de la capital de Perú, Lima, en colaboración con FCC, también española.
FCC es otro ejemplo del éxito del sector de la construcción española en el exterior, pues cuenta en su lista de proyectos con el metro de Riad, en Arabia Saudí, que realizará junto a otras compañías de otros países y la española Typsa. Por su parte, OHL tiene entre los grandes contratos internacionales una línea ferroviaria en Rusia, un hospital en Montreal (Canadá) o el ferrocarril de alta velocidad La Meca-Medina en Arabia Saudí y Ferrovial hará una autopista canadiense, dos en Texas (Estados Unidos) y gestionará las carreteras y se encargará de la función urbana de Birmingham.
La banca también tiene una amplia y creciente tradición de presencia en el exterior, con dos grandes bancos españoles al frente de este éxito. El Santander es la mayor entidad financiera de la Eurozona, con más de cien millones de clientes en una red de 14.400 oficinas, y el grupo financiero más potentes en España y en América Latina, con posiciones muy relevantes en Reino Unido, Alemania, Portugal, Polonia y el nordeste de Estados Unidos y servicios de financiación al consumo en los países nórdicos, Holanda, Austria, Italia y Bélgica. BBVA está en 31 países, donde da servicio a más de 50 millones de clientes, y es la mayor institución financiera de México, aunque cuenta también con franquicias líderes en América del Sur y en la región del ‘cinturón del sol’ de Estados Unidos.
En cuanto al ámbito energético, la mayor presencia de España es en Iberoamérica e Iberdrola y Repsol son las las compañías españolas más potentes en el extranjero. La primera tiene actividad en unos 40 países, con más de 30 millones de clientes, con negocios como la central de ciclo combinado de Koudiet, en Argelia, mientras Repsol está presente en más de 50 países y en zonas de alto potencial energético como Brasil, Rusia o Estados Unidos.